Se te escapaban los rizos de un gorro de punto
y estabas preciosa.
(Javier Krahe)
Sólo por esta noche llévame allí arriba:
cuéntame tu historia, tus sueños, tus vidas,
ciérrame los ojos con cinco sonrisas
que yo me haré verbo, y el verbo, sinfonía,
y serán tus abrazos gloria de otros días,
de un viejo recuerdo, de mañana florida.