viernes, 25 de mayo de 2012

Amor suavis iugum est

Tui lucent oculi
sicut solis radii,
sicut splendor fulguris
lucent donat tenebris.



Carmina Burana (s. XIII)




Tus ojos me han devuelto la sonrisa
que se llevó la marea aquella noche de octubre.

Juan Ignacio López, Presagio

Tiempos difíciles para el amor.
Te recuerdo
                   (nada nuevo bajo el sol)
vanamente en la memoria descompuesta,
esbozando una canción desesperada
que se queda un poco lejos de tus ojos.

Sentir nuestra noche en el recuerdo de aquel día,
desvelándonos la eternidad para nosotros
allá donde se esconde el misterio de la vida,



He renunciado
a la métrica aplastante en el intento de volver
a los viejos poemas cultos del pasado,
(y, en verdad, no se por qué,
si el pasado no me evoca sino angustias y tristezas).

Porque

            allá donde estés, cielo,
mi eterna constante,
paso el tiempo hallando tus indicios
en la imperfección de mi aislada primavera.

Con el leve discurrir de tus caricias, vida mía,
en el hechizo de tu boca consumadas
a la sombra de la noche despejada en primavera,
tu corazón y el mío se buscan, se encuentran.

Y es justo entonces cuando de la más alta torre
el viejo e improvisado Platón cae derribado,
defenestrado.
                       Y un grito lamentoso escapa
donde otrora se encontraba tan noble cabeza
(es el chillido de un corazón atormentado,
deduzco).
                Te miro.
                              Y tú a mí.
                                               Te quiero, princesa.

Y no hay mayor misterio
que la magia engendrada en el deseo de unos labios
desesperados de amor, de carne, de alma y sueño,
mas al tacto vivaces, heroicos, generosos.

Ave,
        Hermosísima doncella.

Leganés, 25 de mayo de 2012. 16:12 h

Bases

Querer desprender
de la sombra de mi evanescente sinsentido
el aura de un poema triste a luz de media luna
tan sólo es el reflejo consciente,
                                                   fugaz,
                                                             de un tiempo perdido,
memorias que se fueron con el viento del otoño,
no volverán.

Volver al origen,
evadir el abismo que separa dos tierras quemadas por el paso del tiempo,
despertarme sobre las ascuas de un sueño vuelto en polvo
y el polvo en ceniza.

Me invade la intuición deliroide, la autodestrucción,
el inefable destino al que estoy encomendado,
morir de estudio,
y me desvelo en la sórdida quietud y las nubes de pólvora de un fin de primavera.

Vuelan las angustias del camino al aire
y del aire a mi recuerdo.
El pensamiento se recrea con la percepción
de cómo los fantasmas miran atrás al rememorar los pasos perdidos.


Leganés, 24 de mayo de 2012.
Trece días antes de la masacre

martes, 22 de mayo de 2012

Sobre un asunto serio

Queridos amigos:

Hoy no puedo escribir un poema. Desde hace tiempo mis estudios de Medicina me ocupan todo el tiempo que antes tenía disponible para componer, escribir, disfrutar, viciarme al Minecraft, etc. Pero quedan poco mas de dos semanas para los exámenes finales y las cosas se me están yendo de las manos.  Mi vida en estos últimos meses se ha visto rodeada por la frustración.

Supongo que no soy el único al que se le olvidan los temas de psicología médica a los cinco minutos de haberlos aprendido. Me siento angustiado por los días que vienen ahora. No se si me lo merezco por no haber cumplido con mi plan ideal y maravilloso de estudiar al día desde febrero o tal vez sencillamente es que soy humano y no puedo seguir el ritmo. Este mes que falta hay que darlo absolutamente todo.

Informo a vuestras mercedes de que en este tiempo, si ve la luz algún poema, será para el ciclo "Insomnio" o algo así; es decir, una vía de escape a la ansiedad en forma de escritura furiosa y desesperada. Por otra parte, renunciaré a mi preciado portátil durante todo el día: me dedicaré a sacar mis exámenes. Los ratos de asueto se los llevarán algunos ensayos de banda y la natación y como mucho me conectaré por las noches porque por razones sentimentales necesito hablar con ciertas personas a las que necesito sentir todo lo cerca que se puede sentir por Tuenti. Esas personas lo saben.

Por último, me queda decir que si mi frustración, de forma consciente o inconsciente, mosquea a alguien o tengo alguna actitud destructiva proyectada, ya sea en los poemas, en persona o por las redes sociales, le ruego que me lo haga saber. No es mi intención, pero las cosas están como están. Ojalá que esto pase pronto y que a partir de ese anhelado 18 de junio volvamos a disfrutar de los placeres de la vida, la amistad, el amor y la libertad.

Hasta entonces, besos, abrazos, carantoñas y achuchones múltiples para todos. Nos vemos pronto.

Juan

viernes, 11 de mayo de 2012

Los días tristes

En la bruma,
ocultos por las gentes,
te mostraste ante mí sutil y deseada.
                                                          Intento recordarte
en las largas tardes de primavera
a la sombra de Madrid,
                                      tú y yo,
                                                   la vida entera;
acaso un primer beso
cerca de la estación que vio florecer nuestro sueño
escondidos de la gente y los viajeros.

Cerrar los ojos, la luz eterna...
                                                 Y escucharte lejana
en el alma descompuesta de una sombra,
en la última calma de los viernes.

Sentirte en mi críptico y noctámbulo lamento,
en el rincón oculto,
en el vivaz reflejo de un sueño a media luz.

Desearte, amor, mi musa ineludible,
en la soledad de esta vida hastiada de estudio;
despertando de un sueño sin fin y sin principio.

Desearte, amor, en estos días inciertos
que subliman las miradas en polvo y cenizas,
donde nuestra noche se confunde con los versos
que escapan al juego de luces en el silencio,
donde la nada es todo y todo es apenas nada.

Desearte, amor, y algún día despertarme
oculto entre tu pelo,
quietud afrodisíaca,
un milagro de onírico deseo.

Al cabo del camino,
nuestras manos tomadas de por vida,
el mundo por delante.
Y sentirme tan solo,
perdido en la sombra de las circunstancias,
sin poder estar cerca de tus ojos noctámbulos.

Mis días tristes y desiertos sin ti,
encadenado a la psicología y a un sueño,
mi sueño de luna y cristal oculto del mundo
(ajeno al espectro deliroide de una noche),
donde las ilusiones se conciben sutiles
al aroma de las frías noches de abril.

Y transfigurarte en humo al acercar mis labios,
o topar con el aire o la pared,
morir de amor en la oscura realidad.


Mi triste poesía esta noche de mayo,
mi espectro enamorado,
se escapa otra vez más por la ventana.
Insomnio.
                Mis ojos te desean en la tristeza....

miércoles, 2 de mayo de 2012

Treinta

Porque tú siempre existes dondequiera
pero existes mejor donde te quiero.

Mario Benedetti, Corazón coraza 



Recordar
en su inmortal presencia,
percibida en el delirio del alba
en un sinfín de iridiscentes amaneceres
el encuentro casual de aquel invierno caprichoso,
nuestro anhelo consumado entre las amapolas,
en la noche perdida, acercándome a las estrellas.

Sentir las lágrimas
en la medianoche de las palabras,
intuyéndome solo;
                    y despertar a tu lado después,
la tácita locura de nuestros sentimientos,
otro presagio.

                Y es entonces cuando abro los ojos
para hallar mi vida entera en los tuyos;
y allí estaré, mi vida,
confundiendo tus límites con los de la Luna,
deseándote en nuestra, aunque tan próxima, distancia;
y allí me encontrarás, siempre fiel y apasionado,
a tu lado, por siempre hasta el final,
añorando
tu mirada en el recuerdo de la primavera,
buscando
la memoria de tu aura dorada en el camino;

y es entonces cuando se obra el milagro,
quietud afrodisíaca tu intimidad de lunes,
desvelo para mis sentidos, tu amor y el nuestro;

y el cielo de Madrid se abre a tus encantos,
buscando el recuerdo de aquel hechizo de viernes
al cobijo de los trenes, la brisa y tus besos.