martes, 15 de febrero de 2011

Valentine's

Dedicado a todos los que no creemos en San Valentín.

Hoy no tengo rosas para ti.
                                           Ni bombones ni ositos de peluche
con tu nombre escrito en la frente dentro de un corazón rosa.


Me queda la voz, mis palabras, mi verso,
me queda el corazón y el sentimiento,
                                                             pero no están en venta.


Sólo tengo esta noche para ti un amor desbordante de deseos
que desde lejos llora el eco de tu místico perfume
anhelando dulcemente la llegada de una nueva primavera.
Sólo tengo la imagen de esa sonrisa indescriptible
que me encuentro cada noche detrás de cada beso.

Sólo tengo esta noche para ti ocho meses de sublimes recuerdos
deslizandose bajo tus sábanas mientras te escribo a la luz de la luna
acunándote allá donde estés, princesa,
                                                             cada día, cada noche...

Sólo tengo mi amor, preciosa,
un amor que huye de mi habitación con cada suspiro,
un amor maldito por la inefable distancia a la que no me quiero someter.


***


Tristeza miserable de amores comerciales que van y vienen.


Dieciocho años de televisión y otras armas de destrucción masiva
me enseñaron que este día hay que tirar la casa por la ventana.
San Valentín esfuma el dinero en flores sin amor,
en falsos peluches diabólicos llenos de cumplidos;
cada catorce de febrero, la masa huye despavorida en busca de regalos
para poder quedar bien otro año más con su pareja.
                                                                                   Y digo pareja, y no amor,
porque es dudoso el amor verdadero que empieza a partir de mil pesetas.

Hipócritas,
                  incrédulos,
                                     estúpidos amantes,
                                                                   que se regalan la Luna y las estrellas.


Y cuando todo ha terminado, cuando se desploman las paredes,
persiste aquel osito de felpa con su corazón en la espalda sobre la cama,
torturando a cada instante las almas atormentadas de los arrepentidos.

***

Sólo tengo mi amor.
                                 Y el tuyo.

Supongo que es suficiente.
                                           Lástima que no se venda.
                                                                                   Aún estoy a tiempo de comprar
                                                                              las últimas rosas...

Leganés, 14 de febrero de 2011

2 comentarios:

  1. acunándote allá donde estés, princesa,
    cada día, cada noche...

    Aún estoy a tiempo de comprar
    las últimas rosas...

    SOBERBIO JUAN, Noe debe estar orgullosísima de ti...esas dos frases son geniales, asi como la de "armas de destrucción masiva". Nunca dejes de escribir, e intenta darte a conocer...Un beso!!! :)

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  2. jaja...orgullosa es decir poco...^^

    Cielo, ni rosas, ni peluches, ni nada. Tenerte a tí es el mejor regalo del mundo, nada puede superarlo (L)(L)

    Me hubiese gustado estar junto a tí (como todos los días), pero...la maldita distancia..brr ¬¬
    A pesar de todo, te quiero como nunca he querido a nadie y eso nunca, nunca va a cambiar...(L)(L) ¡¡TE AMO!!

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